«En paz me acostaré, y asimismo dormiré;
Porque solo tú, Jehová, me haces vivir confiado«. – Salmos 4:8, RVR60
Estoy muy afligida;
¿Hasta cuándo lo estaré?
Cada día se aumentan
Mis temores y el estrés.
Al mirar hacia el futuro
Pienso que no hay esperanza
Cuando miro mi presente
Pienso en todo lo que falta
En las noches lucho fuerte
La batalla en mi alma:
¿Rendirme a la emoción
O meditar en tu Palabra?
Al recordarla me consuelas
Y tus cánticos me envuelven
Me arrullas con tu voz
Diciendo: “duerme, hija, duerme”
“No permitas que el afán
Te prive de mi presencia
¡Yo nunca te he dejado!
Dime, ¿cuándo en tu existencia?”
“Mi invitación sigue vigente;
Ven y entra en mi descanso
Pues mi carga es ligera
Y mi yugo es liviano”
“No permitas que el afán
Te dicte lo que es importante
Si yo estoy presente,
¡Nada podrá turbarte!”
“Tu futuro está en mis manos
¿Y tu presente? ¡También!
Decide hoy creerme;
Estoy aquí, yo te ayudaré.”
Paola C. Rosario