31 maneras creativas de amarlo y animarlo (reseña)

Para el principio del 2018, mi esposo y yo decidimos comenzar este devocional de Alyssa Joy y Jefferson Bethke. Lo más que nos gustó es que eran dos libros, uno dirigido a los hombres y otro para las mujeres.

            Mi plan era leerlo, llevar a cabo los consejos que ofrece y escribir sobre esta experiencia. Lamentablemente, si van a mi blog, no encontrarán ningún artículo porque confieso que no lo terminamos y les explicaré por qué y qué pasó luego.

Una lectura inconclusa y de cómo la terminé

            Me cuesta demasiado leer un devocional. Me siento limitada al tener que leer por día. No puedo. Cuando me siento a leer un libro, me gusta dedicarle cariño y el tiempo que me plazca. Si es una buena lectura fluida y amena, ¿por qué parar?

            Creo que en mi vida he intentado leer tres devocionales, incluyendo Una vida con propósito y 31 maneras creativas de amarlo y animarlo, y este es el primero que termino. Luego de sentarme y retomar la lectura tres veces, dos años después logré terminarla. De la única manera de poder terminar un devocional fue ignorando totalmente que era por día y simplemente continuar. Detenía cuando yo lo decidía o tenía que hacer otra cosa, como se leen los libros normales.

Los retos y sus desafíos

            Una de las cosas que más nos gustó, pero que a la vez encontramos muchas desventajas es que diariamente te aconseja que hagas algo diferente por tu pareja. Algunas de estas acciones son muy simples; otras, no tanto. Por ejemplo, el primer día, Alyssa te dice que ores por tu pareja. Sin embargo, otro día te dice que le cocines una comida entera a la persona en cuestión.

            Esta fue otra razón por la que no continuamos: yo puedo orar sin ningún problema, cuantas veces sea necesario o cuantas veces la autora lo aconseje. De ahí a cocinar, se me hizo imposible. Para ese entonces, no estábamos casados. Yo aún vivía con mi familia, un hogar en el que se cocina mucho todos los días, porque en cualquier momento llegaba visita. Además, yo tenía dos trabajos y estaba completando mi maestría. Mi tiempo era limitado y cocinar para mí es un arte, no todo el mundo nace para eso. Entonces, hubo retos que no cumplimos, así que tristemente nos rendimos.

Retomando la lectura dos años después

            Una de mis redes sociales favoritas es Goodreads. Sí, sí, yo sé que no es una red social como Facebook o Instagram. Goodreads (anuncio no pagado) es una página en la cual puedes conseguir citas oficiales de diferentes autores, libros de autores conocidos e independientes. Además, puedes marcar el progreso de tu lectura. Es un éxito.

            Una de mis herramientas favoritas de esta página es que puedes retarte a leer una cantidad de libros durante el año. Mientras estuve haciendo la maestría, fácilmente podía poner que leía alrededor de unos veinte libros por año. Sin embargo, justo después de terminar no llegué a terminar ni uno en el 2018. En el 2019 me reté a leer al menos cuatro y solo terminé dos. ¡Un desastre! No obstante, para este año me atreví a poner un 10. Es un placer informarles que llevo 7 libros leídos en lo que va de año y me quedan todavía tres meses. [Se besa la mano]

            Como quiero completar el reto, he tomado lecturas cortas, libros pequeños. Cuando estaba revisando mi librero para tomar mi próxima lectura dije: “Este es perfecto. A ver si finalmente lo termino”. Vuelvo y recalco, la única forma de terminarlo era si lo hacía bajo mis términos: para cuando yo quería.

Confrontaciones

            Mientras leía, me percaté de que una de las razones por la cual nunca pude terminar el libro fue por mi propio egoísmo. Esa fue mi mayor confrontación. De hecho, mi primera entrada en la parte de las notas sobre lo aprendido escribí: “Como Alyssa establece, orar es difícil porque naturalmente somos egoístas. Sin embargo, si ponemos ese egoísmo a un lado, estoy acabando con mis deseos y eso es amor. Por eso Pablo dice que el amor duele. Duele porque somos egoístas”.

            Muchos retos no los pude llevar a cabo porque siempre encontraba la excusa perfecta para no hacerlo porque soy egoísta. Me tomó dos años terminar un libro porque mi egoísmo ganó. Tuve que dejar a un lado mi egoísmo para leer un libro que edificaría mi relación. Oh, y de qué manera ha edificado mi matrimonio.

Los retos realizados

            Cuando leí este libro por primera vez, hice algunos retos, los más simples. Unos de los retos fue escribir 10 cosas que amo y aprecio de él. Alyssa aconseja que los escribiera en el espejo del baño, en una nota o en texto. Un día, fui a visitarlo a su casa y fui al baño con unos post-it notes para escribir esas diez cosas y pegarlas en el espejo de su baño. Él había hecho lo mismo en el espejo de mi cuarto sin yo percatarme. Robé su idea, jaja, pero le gustó.

            Hace unas semanas, comencé a realizar los retos, pero siempre trato de incluir una carta. Hace un año, compré un paquete de tarjetas con sobres para dejarle notas. Aproveché y las he estado usando para acompañar las cosas que le hago.

            Hace dos meses, nació nuestra hija y ha sido un tiempo bien difícil como pareja porque no tenemos tiempo. Aparte, habíamos tenido otros factores afectando nuestro entorno, lo que causó mucha tensión entre nosotros. Demás está decir que escogí un tiempo de mayor desafío para hacer estos detalles. Eso ha sido lo más que me ha confrontado. He tenido que dejar mis incomodidades con él, olvidar los argumentos, ignorar la tensión para poder escribir una carta de 26 cosas que amo de él. ¿Saben lo difícil que es hacer un dibujo de nosotros dos luego de haber tenido una discusión? ¡Uy! ¡Qué reto!

Mi reseña y otras críticas

            Luego de haber terminado de leer 31 maneras creativas de amarlo y animarlo y comenzar a llevar a cabo esas 31 acciones, entré a Goodreads para compartir mi reseña. Antes de comenzar a escribir, me puse a leer otras reseñas y vi que para muchos este libro fue una gran decepción.

            Una de esas personas escribió: “Vi este libro y pensé que sería un pequeño desafío divertido para fortalecer mi matrimonio. Pero honestamente, apenas lo logré. No es nada revolucionario: prepárale el desayuno, escríbele una nota, etc.”

            Leer este comentario no me sorprendió porque quizás no sea para todo el mundo. Incluso, cuando éramos aún novios, había muchas cosas que realmente fueron difíciles de hacer, ya que no vivíamos juntos, no nos veíamos todos los días, y el factor económico también nos impidió hacer varias cosas.

            A pesar de que el libro en esta página tiene varias malas reseñas, mi experiencia fue diferente. Es por eso que escribí lo siguiente:

            “Realmente me confrontó a mí y a mi egoísmo. Necesito trabajar en tantas cosas. Estoy muy agradecida por haber leído esto, a pesar de que me haya tomado más de dos años terminarlo. Es gracioso porque es un devocional diario y no pude continuarlo. No puedo leer libros que me detengan, así que decidí seguir leyendo. Lo que también me encantó de este libro es que te permite escribir tus notas y eso me ayudó a desahogarme”.

            No creo que esté en español o por lo menos no lo he visto, pero si puedes, intenta leerlo, aun si no tienes pareja. Es una buena manera de prepararte para cuando llegue esa persona. Eso sí, si van a completar los consejos, les diría que no se restrinjan, sino que usen las palabras de Alyssa como una guía. Improvisen un poco y espero que su lectura no sea una decepción, sino una verdadera confrontación.

            Si lo leen, me encantaría conocer su experiencia, tanto de la lectura como con los retos.

Un abrazo,

Isa Figueroa

lanoviadelpastor.com

Copyright © 2020 Pote De Sal

Todos los derechos reservados potedesal.com

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s