Algunas de mis amistades saben que estoy estudiando en Wesley Theological Seminary en Washington, DC., este tiempo ha sido una experiencia sumamente retante, enriquecedora y formadora. Una de las clases que me ha gustado mucho se llama: Spiritual Formation/Formación Espiritual. He aprendido a valorar cada cosa que pasa en mi vida (buena/no tan buena), sin menoscabar mis acercamientos por sencillos o atípicos que parezcan, con el fin de mantener mi relación con Dios de una forma genuina, pura, sincera.
Persisto en mantenerme conectada al vid (Juan 15:5), porque estoy consciente que son demasiadas las cosas que suceden a nuestro alrededor y en nuestro interior, que atentan contra nuestra relación con Dios. Hay muchos líderes en este momento, AHORA, que están batallando con sus realidades, con la falta de fe, con el agotamiento físico y mental, problemas familiares, de salud, problemas financieros, lideando con falsas acusaciones, defraudado/a por su iglesia, etc., pero aún así siguen predicando, aconsejando, visitando, siendo la persona fuerte a quien todos acuden. Luchando en silencio, riendo mientras en su interior se siente desfallecer. Frustrado, enojado, triste, deprimido, pero sin decirlo por miedo, verguenza y evitar perder la imagen de ser la persona fuerte que imparte esperanza a todos.
“Orar por tus amigos es muy importante porque a veces estan peleando batallas grandes que jamás te contarian. Asegurate de que estén cubiertos.”
A principios de mes leí un artículo que titulaba “Estuve muy cerca de perder la vida – Asegura Christine D’Clario tras sufrir depresión posparto”. Inmediatamente abrí el artículo para saber qué sucedía con ella y créanme me dió mucho dolor saber por lo que ella estaba pasando. Sin embargo, me siento muy orgullosa de ella porque habló, pidió ayuda a tiempo. Confensó que sintió verguenza de verbalizar por lo que estaba pasando, pero se armó de valor y ya se está recuperando. ¡No estamos solos!
Ahora bien:
Está bien si hoy te sientes triste…
Está bien si hoy te sientes frustrado/a…
Está bien si hoy te sientes sin esperanza…
Está bien si hoy sientes coraje…
Está bien si hoy sientes que te falta la fe…
Está bien si hoy sientes llorar…
No voy a minimizar tus sentimientos, no te voy juzgar ni condenar porque “a pesar de tener una posición de liderazgo te sientes así”. Sin embargo, sí quiero pedirte con mucho amor que busques a alguien con quien puedas hablar, busca ayuda, ventila, suelta, siente, expresa. Por favor, por duro que en ocasiones pueda ser sigue orando, aún cuando de tu boca no puedan salir palabras. Pronto saldrás de esto y serás más fuerte… y eso, eso está bien.
Con Amor,
Jennifer