Sigue Adorando

Esta frase la he estado utilizando al final de mis artículos; pero en esta última ocasión del año, será el tema principal.

La razón por la cual utilizo esta frase al final de mis artículos es porque te invito a aplicar todo lo que hemos aprendido sobre la adoración:

Primero, hablamos sobre cómo las situaciones nos avisan que algo mas grande viene para nuestras vidas de parte de Dios. Y que es por eso que debemos adorar con más fuerza cuando vemos que la vida se pone dura, porque estamos celebrando de antemano la victoria. Luego aprendimos que la adoración es una declaración de confianza a nuestro Padre, pues reconocemos que Él es Rey, sobre todo, y que le confiamos completamente nuestra vida. También vimos que la adoración es capaz de liberarnos de las cadenas que nos pueden tener cautivos; no solo a nosotros mismos, sino a las personas que nos rodean. Que es capaz de cambiar la atmósfera de un lugar y traer el Reino de Dios a la tierra. En “Cuando la música se apaga” aprendimos que cuando la vida no aparente darnos razones para adorar, pues nosotros hacemos nuestra propia “música”, pues nuestro amor por Dios no depende de las circunstancias. Y en el ultimo artículo, “La Cueva de Adulam”, pudimos conocer que Dios quiere que vayamos a Él; que nos refugiemos en Su amor, y nos derramemos delante del Padre en adoración.

Quizá te hayas dado cuenta de algo, y esto lo he mencionado muchas veces: la adoración no es solo el tiempo devocional que se lleva a cabo en un servicio. Cada una de estas cosas se practican como ESTILO DE VIDA. Porque la adoración se traduce a nosotros MAGNIFICAR el nombre de Jesús aquí en la tierra. Desde hace dos años que llevo dentro del Pote, sigo diciendo lo mismo. No eres adorador por tu voz, ni por tus habilidades en lo que sea que te empeñes; si, es bueno desarrollarte y afilar tu talento, claro que sí. Pero lo que te hace adorador es tu corazón dispuesto a vivir un estilo de vida en el cual el centro de tu mayor anhelo sea conocer a Dios y hacerlo conocido.

Pero lo que te hace adorador es tu corazón dispuesto a vivir un estilo de vida en el cual el centro de tu mayor anhelo sea conocer a Dios y hacerlo conocido.

“Sigue adorando” es mi invitación para ti. Te invito a que experimentes una relación con Dios como nunca lo has experimentado. Es lo mejor que puedo ofrecerte.

Este ha sido un año diferente, lleno de golpes, y de muchas preguntas para Abba. Lo sé, las he tenido también. Pero qué lindo es levantar una adoración en medio de todo, porque nuestro PADRE NO CAMBIA. Cuando no sepas la respuesta, cuando no sepas qué decir, solo levanta tus manos, alza tus ojos a los montes, porque de ahí vendrá tu socorro.